Ya hicimos historia. Me vindican tus brazos... Luna de miel en Florencia.
Robar un beso a la calle en el largo trayecto hacia el sueño… Magia es tu
lengua infinita. Sagrada Escritura que me atrevo a proferir… El telescopio se
mancilla en sus cascadas. Absorbe el Caos y lo absuelve… Proyecto de papel
cuarto menguante. Temblor de tierra -dicen que es terremoto pero es Dios-. La cólera.
La sangre del silencio. Mi destino... No acepto protección de los arcángeles. Desaparece
la luna, el alfabeto, la falsa crueldad. No oculto el rostro en mi
desgarramiento… Penitencia: Padrenuestro, Avemaría y Gloria… Debo meter el
epitafio en el bolsillo. ¿Quién pone la daga sobre el verso? ¿Quién me presta a
Rocinante? Alguien lanza girasoles. Agita mis pañuelos. No llora… ¿Desde qué
brújula me envían el veneno? La tierra es la esfera a punto de estallar en mi
cabeza… No quiero ser la virgen… ¡Aleluya! ¡Al carajo! ¿Quién confunde a esta
puta intelectual?
MDenis©Desnudo del Fénix 1997
Qué gusto leerte, amiga. Estupendo!
ResponderEliminarAbrazos
Gracias, amigo. Como habrás visto es un texto muy viejo... Aún estaba en Cuba.
ResponderEliminarAbrazos.
Pues, ya eras una poeta de alto vuelo. La relectura me hace aun mejor poema. Cuánto te admiro!
EliminarAbrazos
Gracias, querido Pichy. La admiración es mutua.
EliminarBesos
Escepcional, amiga. Ha sido un placer leerte. Saludos cordiales.
ResponderEliminarMuchas gracias, Marina.
ResponderEliminarSaludos!