Voy a bendecir el día de mañana
el
himno
inmortalizado en cada mártir
la
bandera
que puede no ser nuestra enseña
patria
pero
sí la del exilio
que es el cielo…
y con
un canto universal
seguiré
frecuentando los adoquines
y los gastados huesos de La
Habana.
MDenis©laruedadelsilencio
No hay comentarios:
Publicar un comentario