La Poesía
ocurre como las gaviotas
en el alma
de Dios y en nuestros labios.
La Poesía
en estos tiempos no admite pereza
ni
psicofármacos
ni manto
enjoyado para cubrir la vergüenza.
La Poesía
ocurre en los cuadernos
y en los
ojos tristes de la Gran Patria.
La Poesía
ocurre en el alfabeto de cada lengua
y crece
y crece
para no
ser mancillada en la mediocridad de los sublimes.
La Poesía
ocurre en la fusión de los cuerpos
en el
plato caliente del mendigo
en el roto
zapato aventurado al mundo.
No la
dejemos anidar en el pasado porque a veces muere
y muere
hasta que
explota en los silencios temerosos.
Quien la
encuentre en el limbo
por favor,
¡bajadla!
¡Bajadla
de las calendas medievales
y hacedla morder nuestro presente
sangriento y colapsado!
Luego
sembradle
flores en el vientre
y después
-solo después-
a nuestro
corazón ofreced su militancia.
MDenis©enbúsquedadelrayoverde
¡Vaya! cuánta razón ocurre en este poema y cuanta poesía nacida de tu corazón.
ResponderEliminarMuchas gracias por tu siempre grata presencia. Abrazos a pesar de la C. de F que, por cierto, me encanta!
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