Autora: Lalita Curbelo Barberán, Holguín, 1930
Y EL OTRO ÁNGEL
Dormido en el silencio quieto
de BOCAS ENCENDIDAS cantó su última ola,
apuró con tristeza el VINO del otoño
y lanzó su corazón entre las olorosas
ramas de los eucaliptos.
Yo estaba entre los rostros quietos de la espera
sobre pilotes donde las GAVIOTAS reposaban,
lo veía llegar
saliendo de una habitación ILUMINADA
donde las paredes de sal parecían fabulosas
montañas.
Un PÁJARO extraño y negro PICABA
con desesperación
un cangrejo MUERTO en la ARENA.
La costa era un abrazo de ALAS y sargazos
y el perfume del MAR lo inundaba todo.
Llegó DEVORANDO palabras
y atravesando noches
dejó su AMARGO testimonio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario