en mi vientre palpitan tus viñedos
como tiernos meteoros.
no permitas que marchiten.
hoy no.
me he ceñido al candor de la soledad
para aplacar la cólera
que sin sacramento
me consume.
ya no soy la muchacha de los azules orgasmos
y es hora de asumir las tempestades.
yo me ofrezco
pero sálvame de la fronda
y de este viento
donde incinero las estrellas.
Querida amiga, de los 8 poemas no sé con cuál quedarme, son maravillosos todos y lo que más me ha gustado es un cierto dejo de ternura que se presenta en contadas ocasiones en tu poesía, siempre sos más oscura y aunque estos poemas tienen ese sello transmiten un costado tuyo más "sensible"! jjajajaaa quien me ha visto y quién me ve haciéndote este tipo de devoluciones!!! Un besote amiga!!!
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