CASI PUNTO FINAL
La vida continúa… ¿Cómo olvidar que la lluvia ya no bañará mi
cuerpo? ¿Y que este día, mañana
ya no será más este día? Será uno más del infinito perdido entre el
oleaje de la memoria… Odio los
relojes con su puntualidad. Indican que mañana
será un eslabón más en la cadena del tiempo y, por
tanto, estaremos otro día
más viejos y distantes… ¿Cómo olvidar que llegará con mucha vida
otro día
cualquiera, otra noche y punto? Los días son frenéticos menguantes de la
historia y la
nuestra se escribe con saliva. Por lo pronto, soy la lunática que
afila el verso y lo convierte en garra
para embestir otra suerte. No quiero fama ni gloria. Solamente aspiro a
un pedazo de estrella…
¿Cómo trascender el silencio? ¿Qué piedras atesoran el
secreto de mi manojo de angustias? Una vez
fuimos todos matados por el hambre y
ahora zozobro. ¿Cómo recibir los donativos del buen
estado de ánimo? ¿Quién
desata las legiones de honor de la conciencia o le pone el cascabel al
gato? ¿Quién eyaculará otra esperanza?
¿Cómo ser mejor? La claustrofobia digiere la última
lágrima. Ya nadie pone en jaque a la reina. ¡No hay
reina! Solo las bocanadas de humo atestiguan
que me asesino mientras me desnudo
y abro la ventana… ¿Dónde está el
cielo? Repican las
campanas una vez, otra y otra… mientras en la capilla
alguien reza por mí. ¡Ojalá que aparezca
algún arcángel! Alguien envía mensaje
desde Cuba. Texto fiel: ¿qué es la
libertad? A veces soy
enmienda y, otras, la alucinada, aunque todos falten
a la cena de mi cuerpo. Cualquier
enfrentamiento puede ser mortal… No puedo ir
al mar como lo hacen los tristes… La bahía
abre sus piernas al forastero de
lujo… Por eso no puedo ir al mar. Padezco de espasmos
terrenales… ¡Cierren las
puertas! ¿Es consecuencia de culpa original? ¿Hay culpa original? La
epidemia
del súper-hombre está de moda. OJO: ¡no
beber la luz ni te dejes cegar por las noticias!
Puntos suspensivos o clave
morse que da un puntapié a mi cabeza, aunque de esto no voy a morir… No voy a
morir ningún jueves del alma. Esos son exclusivos de Vallejo que sufrió su
dolor sólo como
el de César Vallejo y no como el de Jorge Cristóbal, a quien le
amputaron la lengua cuando quiso
decir PAZ y trató de arrancarse la cruz sobre
arena movediza… ¡Sorpresa! ¡Fui la ermitaña más
pública de las Oficinas de
Emigración de La Habana! OJO: ¡no beberse la luna! Por la ranura de la
capa de
ozono se escapa la vida… Yo no sé: soy una muerta muy loca… ¿Quién me explica
el más
allá de la muerte? He apostado todo al polvo para que alguien me
desmienta… Un gato se descuelga
por el
balcón de mis ojos mientras entrego la imperfección de mi costilla al santo
sacramento de la
patria. OJO: ¡Patria es igual a Partido! Aunque somos muchos
partidos por el eje de la
intelectualidad ciudadana… Alguien me confiscó la
sonrisa cuando apuñaló mi visado. ¿Cómo
traspasar nuestro callejón? Los
cronistas duermen la siesta de los breves desastres y yo tomé
como derrotero un
avión rumbo al País del Nunca Jamás. ¿Cómo fulminarme en esta página?
¿Acaso la verdad puede promover ciertos
delirios? ¿Acaso la verdad puede resumirse en un panfleto? San Comunismo es el
despojo de mis honras fúnebres. La castrofobia es el padecer atroz de este
colapso, el pecado capital de mis manías y del destierro a otra copa de amargo
vino.
De: BAJO EL CIELO DEL EXILIO