https://www.amazon.es/dp/B08JDTR2M1?ref_=pe_3052080_397514860
PARA UNA LUNA EN MENGUANTE CADA DÍA
Enfermo
de coordenadas y peñascos
de
raíz sin escalinatas.
He
llegado a tu labio
-es
decir
a
tu corazón de cielo-
que
clava en mi furia la alucinación.
Dios
podrá vindicar el gentilicio
de
estas piedras
si
nos recostamos al pasado.
Húndete
en mi sexo…
Mientras
tanto
voy
hilando en las charcas tu perfume.
No
puedo comer
la
manzana de la perdición
pero
con ojos pálidos amenazo los días
y
enveneno los mapas donde te ausentas.
Voy
a regalarte un cordero sin boca
para
que estén fuera de peligro
todas
las flores
y
logremos amanecer junto a las grutas
cuando
cualquier mago
nos
saque entre pañuelos.
Hoy
mi ferocidad se llama asteroide
y
los recién llegados
no
tienen cabida entre las piernas
que
devoran el destiempo
con
su luna envejecida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario