EXPOSICIÓN LEÓN. MUSAC HASTA EL 17 DE MAYO |
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Imaginar como forma de actuar; el espectador como partícipe de la obra |
Más de seis décadas de creación conceptual en la mayor muestra de Yoko Ono en España desde 2013 |
El MUSAC dedica una amplia retrospectiva a Yoko Ono, quien a sus 92 años, es figura esencial del arte contemporáneo y pionera del conceptual, la performance y el cine experimental. Insound and Instructure reúne más de ochenta piezas que recorren más de seis décadas de una práctica que sigue vibrante y sigue desafiando al público en cada encuentro. Desde sus célebres obras de los años sesenta como parte clave del movimiento Fluxus, hasta proyectos recientes, la exposición revela la vigencia de un pensamiento que ha expandido las posibilidades del arte con una radical sencillez: instrucciones como chispa creativa y participación del espectador en el arte. La exposición está comisariada especialmente para el MUSAC por Álvaro Rodríguez Fominaya, director del museo, y Jon Hendricks y Connor Monahan, ambos del estudio de Ono. Estos últimos han sido los responsables de la edición reciente de la obra Ono, incluyendo la gran retrospectiva Yoko Ono. Music of the Mind, que se inauguró en la Tate Modern en 2024. Las obras de Insound and Instructre “no se ven, se viven” según expresó Monahan, director de Studio One de Ono, durante la inauguración en noviembre. |
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La muestra toma su título de un concierto y una exposición que Ono presentó en Tokio en 1964, donde articuló dos vectores que atraviesan toda su obra: el sonido como materia y la instrucción como forma. Sus piezas textuales, invitaciones a imaginar o completar la obra, sitúan al espectador en el centro del proceso creativo. La imaginación, para Ono, es un acto político. A principios de los sesenta, su loft en Nueva York se convirtió en un epicentro del arte experimental. Allí, junto a La Monte Young, impulsó performances que serían decisivas en el surgimiento del movimiento Fluxus, donde Ono desempeñó un papel fundamental junto a George Maciunas. La exposición subraya esa herencia: su influencia en la performance, el cine estructural, la instalación y el arte participativo. También resuena su dimensión activista. Obras surgidas de Grapefruit (1964) conviven con trabajos posteriores que abordan feminismo, ecología y paz, expandiendo el marco de su poética conceptual hacia un compromiso profundo con el mundo. Insound and Instructure se despliega así como un diálogo no cronológico entre ideas, acciones y formatos: un mapa de casi setenta años de creación que sigue anunciando nuevas posibilidades para el arte —y para la imaginación contemporánea. Avda. Reyes Leoneses, 24. |
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